Plantear esta pregunta viene a ser algo así como una ucronía (un presente ficticio, construido sobre un pasado distinto, que nunca llegó a producirse). Sí, es cierto, pero en FOCUS Marketing Research South West Europe hemos querido hacer este ejercicio imaginario para poner en valor lo que aporta el market research tanto a las empresas que comercializan productos de consumo masivo como a sus clientes finales.
Imaginemos por un momento que las empresas no tuvieran otra alternativa que lanzar productos y servicios al mercado a ciegas, sin tener la menor idea sobre su grado de aceptación, sobre la oferta de la competencia, sobre el tamaño del segmento de sus eventuales clientes, sobre sus deseos y necesidades reales…
En ese escenario la innovación sería impensable, porque las empresas se verían obligadas a operar en base al ensayo y error, comprometiendo recursos preciosos en productos y servicios de comercialización impredecible, y a unos costes difícilmente asumibles por buena parte de la audiencia.
Las empresas operarían en la más absoluta ceguera, intentando acertar a ciegas con las tendencias del mercado, con las preferencias o deseos cambiantes de los consumidores y con total desconociendo de la oferta y las estrategias de sus competidores. Las organizaciones no serían capaces de entender a sus potenciales clientes y, por tanto, anticiparse a sus necesidades. Asistiríamos a un mundo de oportunidades perdidas y desafíos insuperables.
Por su parte, los consumidores tendrían que nadar en un mar de confusión e incertidumbre, intentando comprender una oferta de productos y servicios descoordinados e inconexos entre sí, pues cada empresa lanzaría al mercado sus propuestas sin guía ni concierto, y que pudieran no ajustarse a sus necesidades y/o cumplir con sus expectativas.
CUESTA MUCHO IMAGINARLO, ¿VERDAD?
Sin embargo, tenemos la suerte de no vivir en un mundo de estas características. La investigación de mercado beneficia muchísimo a las empresas, pero desde luego también a los consumidores, pues les permite elegir y disfrutar de productos y servicios realmente necesitados o deseados, frente a la imposición que supondría la ‘oscuridad’ de la ausencia del market research.
Para las empresas, la investigación de mercado es un haz de luz, potente y revelador, que les permite comprender las necesidades, preferencias, deseos y comportamientos de sus respectivas audiencias y, así, facilitar la toma de decisiones informadas, que hagan posible anticiparse a desafíos futuros y aprovechar distintas oportunidades.